Limpieza: Es importante limpiar regularmente la lámpara de sal para mantenerla en óptimas condiciones. Puedes limpiarla con un paño húmedo y secarla con un paño suave. No uses productos químicos o abrasivos, ya que pueden dañar los cristales de sal.
Asegúrese de mantener la lámpara encendida durante 5 a 10 horas diarias para evitar que se acumule agua. Nunca coloque su lámpara de sal al aire libre o en una habitación húmeda como el baño. El uso de una bombilla de alto voltaje puede evaporar el agua más rápido. Utilice absorbentes de humedad cerca de la lámpara.